Braşov - Rumania.
Braşov es una histórica ciudad rumana y que cuenta con más de 280.000 habitantes. Está a 165 km de la capital rumana Bucarest. Es una ciudad turística muy popular por su ventajosa ubicación en el centro de los destinos turísticos. Con tantos hoteles, cabañas, restaurantes y clubes, la ciudad es un punto de partida para excursiones por todo Rumania.
Un asentamiento fundado por la Orden de los Caballeros Teutones en 1211 constituyó la base de la actual ciudad de Brasov. En 1234, el Catalogus Ninivensis mencionó por primera vez la ciudad bajo el nombre latino de Corona. En los siglos XIII y XIV, Braşov fue atacada por los mongoles y los otomanos respectivamente. Un inmenso sistema de murrallas, eregido para proteger la ciudad, se mantuvo en servicio hasta el siglo XVII.
En el siglo XVI, la ciudad conoce un importante adelanto económico gracias a su posición geográfica estratégica y a ciertos privilegios fiscales.
En el siglo XVI, la ciudad conoce un importante adelanto económico gracias a su posición geográfica estratégica y a ciertos privilegios fiscales.
Sin embargo, en 1689, un incendio causado por las fuerzas invasoras austriacas dañó gravemente la ciudad y la población debió hacer frente a una epidemia mortífera.
La destrucción de las murallas, y la aparición de fábricas y manufacturas en el siglo XIX, permitieron un resurgimiento de las actividades. Por entonces se editaría la «Gazetta de Transilvania», un diario que militaba por la independencia de la región, ocupada por el Imperio austríaco.
Tras la Primera Guerra Mundial, Braşov pasó a ser el segundo centro económico rumano en importancia después de la capital Bucarest, pero la ciudad sería parcialmente destruida por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
La renovación y la industrialización a gran escala llevadas a cabo por el régimen comunista aportarían nuevamente vida a la ciudad centenaria. En 1987, masas de trabajadores de Braşov protestaron activamente contra el dictador comunista Nicolae Ceausescu, que sería derrocado al año siguiente, siendo Braşov uno de los principales bastiones rumanos que llevaron a la caída de este personaje.
La destrucción de las murallas, y la aparición de fábricas y manufacturas en el siglo XIX, permitieron un resurgimiento de las actividades. Por entonces se editaría la «Gazetta de Transilvania», un diario que militaba por la independencia de la región, ocupada por el Imperio austríaco.
Tras la Primera Guerra Mundial, Braşov pasó a ser el segundo centro económico rumano en importancia después de la capital Bucarest, pero la ciudad sería parcialmente destruida por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
La renovación y la industrialización a gran escala llevadas a cabo por el régimen comunista aportarían nuevamente vida a la ciudad centenaria. En 1987, masas de trabajadores de Braşov protestaron activamente contra el dictador comunista Nicolae Ceausescu, que sería derrocado al año siguiente, siendo Braşov uno de los principales bastiones rumanos que llevaron a la caída de este personaje.
Muchas gracias Ane por esta postal, saludos a tu hermosa familia.